Dar cera, pulir cera.

Parece que si.

No sabemos si demasiado tarde, pero después de dar varios tumbos a lo largo de la temporada, todo hace indicar que con la llegada del 2011, el Sevilla empezó a aplicar aquella mítica frase que hizo famosa el singular Miyagi en la no menos famosa película de los ochenta, Karate Kid: "dar cera, pulir cera".

En la misma, al alumno Daniel Laruso, le costó asumir la filosofía que el señor Miyagi trataba de inculcarle: para llegar a tu destino, es preciso conocer el camino y saber como recorrerlo, antes que empezar a andar con mucha ilusión pero sin un rumbo fijo.

Finalmente, el joven alumno asumió que lo mejor para alcanzar ese destino era empezar siempre por los cimientos.

Con el tiempo , Daniel aprendió la fuerza y la importancia de la metodología como medio para conseguir los objetivos, a través del poder del esfuerzo, la paciencia y la constancia.

Tengo la impresión que esta temporada para el Sevilla FC, ha estado marcada precisamente por todo lo contrario.

Por momentos, se ha querido dar cera, sin detenerse a pulirla. Otras, se ha pretendido pulirla sin ni siquiera haberla dando antes.

En muchas de ellas, estando la cera disponible, ni se ha dado, ni se ha pulido...

Desde aquel agónico gol de Rodri en Almería, a aquella fatídica previa de champions, eliminados en la Europa League y la copa del rey, partidos en liga para olvidar, un vestuario "raro", dudas en el banquillo, unos objetivos inciertos, demasiados altibajos en una temporada en la que se había puesto muchas ilusiones en recobrar la senda de los éxitos.

Con el mercado invernal, este Sevilla parece que ha recobrado algo del brillo que se dejó matizar nada más comenzar la temporada 2010/11.

En este tramo final donde el equipo, como mal menor está en disposición de poder competir por esa complicadísima cuarta plaza, donde lamentablemente se está hablando más de lo que está por empezar que de lo que está por acabar, (los cimientos de la 2011/12 están por culminar...), esperemos que estemos a tiempo todavía de terminar de pulir toda la cera que en estas ocho últimas jornadas habrá que ir dando partido a partido, para que al final del campeonato, este Sevilla pueda lucir brillante y reluciente.

24 puntos. No hay más cuentas.

Dar cera, pulir cera.