Solo quiero decirte amigo que te quiero.
Que solo ansío que en breve deje de dolerte cada poro de tu piel.
Que el de la bata verde (o azul) haya hecho un buen trabajo y que pronto vuelvas a sonreír.
Que el miedo haya dejado paso a la esperanza de padecerlo.
Que pronto vuelvas a tu butacón, donde sus mullidos brazos seguirán humeando por el roce de tus amigos, como siempre, no lo dudes.
Cuando te duela mirar hacia atrás y te de miedo mirar adelante, mira hacia la izquierda o la derecha y allí estaré, estaremos, a tu lado.
Los invisibles, y sus armas.
A mi amigo, José Manuel García Otero. |
¿Quién es el que sale a la derecha de mi amigo Juan Ángel en la foto...?. Espero su pronta recuperación yo también, muy grand él, pero más grande es lo tuyo, amigo.
ResponderEliminarPor estas cosas es por la que se quiere a los amigos, por esto y por muchos post que me vienen a la memoria, yo también debo reconocer que te quiero, amigo (sin malos pensamientos para otros...).
PD: Me apunto este post, no se para que... :-)
Un abrazo, amigo!!
+ 100000000000000000000000000 sin palabras.
ResponderEliminarEmotivo, entrañable y seguro que merecidas palabars de un amigo. Esta entrada te honra.
ResponderEliminarSaludos.
Cuando sacas a relucir la sensibilidad hay que decir como Caparrós !!de mamazo!!
ResponderEliminarSi hoy pudiera leerlo, que podrá, se sentirá inmensamente orgulloso de contar con un amigo como tú.
Los miedos son sólo estados de ánimos y lo más humano que hay en nosotros.
Un abrazo para él y otro para tí. Con un deseo, que vuelva pronto.
Gran detalle
ResponderEliminarLos amigos son los que en las buenas no aparecen y en los momentos mas complicados aparecen sin llamarlos
Un abrazo
Precioso, sin más.
ResponderEliminarEse amigo tuyo tiene un tesoro teniendo un amigo como tú.
Un abrazo