Marcelino tenía razón.

  Previa del encuentro Sevilla FC - RCD Español:

"Lo entiendo todo. Si un equipo como el Sevilla FC lleva nueve puntos de 30 en Liga, claro que hay que tomar decisiones si no es capaz de cambiar esa dinámica. Y para un club es más fácil prescindir de uno que de 20. Es una realidad que no podemos esquivar ni cambiar, la cambian los resultados y, si ganamos estos dos últimos partidos de la primera vuelta, no hacemos números extraordinarios, pero no son malos. Si perdemos estos dos…pues ¡hala! No puedo considerarlo una situación injusta. Y no lo quiero poner fácil, porque estoy pensando en ganar. Pero hay que ser coherentes. Los resultados son los resultados, y los números son los números".

Antes de continuar, me gustaría ampliar esas nefastas estadísticas advirtiendo que ya no solo se trata de haber obtenido nueve puntos de 30 posibles, es que es la situación es aún más dolorosa y preocupante: este Sevilla ha conseguido en los últimos 13  partidos la friolera de 11 puntos.

Once de 39 posibles.

Si no me equivoco, estoy por apostar que son números de descenso pero de largo.

Creo sinceramente, y de veras que me duele decir esto, yo que he sido un paciente y fiel defensor de la continuidad de Marcelino, que la situación se ha vuelto insostenible. Como el propio Marcelino comentaba en aquella previa frente al RCD Español, en situaciones como esta es más fácil echar a uno que a 20. Lo dijo el propio Marcelino, no lo dije yo.

Es la inoxerable ley del fútbol.

Por encima de todo y como no podía ser de otra manera, el Sevilla FC está a años luz de todo lo demás.

Lo de que sea justo o no, ahi no puedo estar del todo de acuerdo con quién a día de hoy es  todavía  técnico sevillista. Creo que Marcelino se ha equivocado, que ha cometido errores de bulto, pero a mi nadie me va a convencer a estas alturas de lo contrario que el fútbol es de los futbolistas y que en un porcentaje muy alto, la responsabilidad de que el equipo esté inmerso en la situación que está son de los propios profesionales que se visten todos los fines de semana de corto.

Por aptitud, por actitud, por falta de competitividad, por falta de calidad o vaya usted a saber cualquier otra razón, a este equipo en cuanto el rival de turno le mete algo de intensidad a los partidos, es un simulacro de equipo.

Si para colmo se fallan ocasiones de gol tan clamorosas como por ejemplo, la que falló ayer, una vez más, Negredo, el problema deja de serlo como tal para pasar a ser una verdadera utopía su solución...

Solución que para el propio Marcelino, al igual que comentara hace pocas fechas, "es sencilla"...

No se, la verdad es que no se como interpretar todo esto. Estamos hablando de un equipo como el Sevilla, donde muchos de sus profesionales son internacionales y acostumbrados incluso a competir por objetivos importantes, para que después de 7 meses entrenando con el mismo técnico estos no sean capaces de desarrollar sobre el césped algo tan aparentemente sencillo.

Claro, que después de escuchar a Negredo decir algo así como: "No hemos hecho lo que ha pedido el míster", pues a uno le da por pensar aún muchas más cosas.

Quizás no sea tan sencillo...

Quizás los futbolistas no le entiendan....

Quizás los futbolistas no sepan...

Quizás los futbolistas no puedan...

Quizás, bueno, querer si que querrán, ¿no?..., que se yo, por decir algo...

Ya he comentado en alguna que otra ocasión que no me gusta para nada el vestuario del Sevilla desde hace 3 años para acá. Hablo naturalmente  de equipo, de solidaridad, de compañerismo, de compromiso, incluso, por qué no, de sevillismo, todas aquellas virtudes que como el propio David Castedo nos hablaba hace unos días en Almas Sevillistas hicieron y forjaron un Sevilla competitivo y campeón.

¿Un cáncer dentro de ese vestuario?... No quiero creerlo.  No quiero pensarlo. No se tú...

En cualquier caso, de haberlo, de existir, que rueden cabezas y cuanto antes se extirpe antes sanaran las heridas.

Como quiera que sea, esto solo se revierte con resultados, con buenos resultados. Los mismos que no llegan.

Ojalá que las incorporaciones invernales empiecen a sumar al equipo más pronto que tarde y que junto a los futbolistas que en teoría deberían  tirar de este carro hagan resurgir a este Sevilla.

Con Marcelino, o sin él. No pensemos que el único problema de esta situación está simplemente en el banquillo.

Por cierto, me gustaría preguntarle a Negredo una cosita: ¿A la euroqué dices que te gustaría ir...?

¿Eurocopa?. ¿De verdad?...

No quisiera pasar por alto el comentar que en mi opinión, Marcelino tiene toda mi consideración y mis respetos. Me parece un trabajador honrado y un buen entrenador al que por las causas que fuere, la suerte le está siendo esquiva en el que sin duda es uno de los mayores proyectos de su carrera profesional. No veo necesario el tener que vilipendiar y caer en el insulto y el menosprecio fácil a la hora de opinar de Marcelino como entrenador.

De producirse el fatal desenlance de la destitución de Marcelino, me gustaría que de igual manera algunos futbolistas de la primera plantilla del Sevilla FC se lo hiciesen mirar.

Si pueden.

Once puntos de 39.

Lamentablemente, y creo que si solución de continuidad, Marcelino tenía razón.