Ante todo quisiéramos hacer constar que este escrito sólo va dirigido a..."ciertos" periodistas deportivos de esta bendita ciudad. Por suerte no a todos, pero por desgracia a muchos; que unas veces son esclavos de sus propias mentiras, odios e inquinas y otras, son servidumbre, payasos y bufones de sus jefes de Madrid.
¿Existe corrupción en ciertos periodistas deportivos de esta ciudad?
No están todos los que pudieran ser y afortunadamente, no son todos los que están. |
Antes que nada decir que: "Corrupción periodística es la acción de una o varias personas reales (no va por la familia del Rey) que manipulando los medios de un sistema en beneficio propio, tergiversan a su antojo los fines del mismo en perjuicio de algún ciudadano, porque este sistema fue ideado para informar a la sociedad, nunca para manipularla".
¿Manipular conscientemente la información es corrupción periodística? Entonces tenemos ante nosotros un grave problema de corrupción periodística en nuestra ciudad.
Si eso es corrupción, el corrupto será el autor de los hechos.
No hace mucho tiempo decía el periodista británico Nick Davies: "Hoy, muchos de nuestros medios de comunicación se han convertidos en fabricantes masivos de distorsión continua y linchamientos mediaticos".
Un sector bastante importante del periodismo ha pasado de denunciar falsedades e injusticias, a convertirse en un conducto para la propaganda de insidias e "impartir justicia sui generis" sobre personas o entidades sin el más mínimo pudor. Es la corrupción periodística en estado puro.
Lo dice el prestigioso periodista Nick Davies. ¿Da con la flecha en la diana?
Ocurre con mucha frecuencia que la corrupción periodística comienza por la corrupción de la propia información.
Ciertos periodistas de "tercera división" comienzan queriendo trabajar como..."idiotizadores de gente", escribiendo un cuento para que el idiota de turno se lo crea. Y a fe que la mayoría de las veces muchos de los lectores u oyentes se lo creen, porque para eso han sido idiotizados, o sencillamente nacieron ya así.
Muchos de estos pseudo-periodistas, creadores consumados de mentes ineptas, desconocen mínimamente sus preceptos éticos y morales y la subjetividad de estos malhechores de la profesión llegan a límites insospechados para saciar sus ansias de venganza y poder.
Sin ir más lejos, ahí tenemos el trato dado a la información sobre las medidas cautelares en el caso "Minutas" donde iban a la caza y captura de D. José María Del Nido.
Algunos, que ahora no respetan a que se pronuncie el Tribunal Supremo, cuando a ellos sí se les respetó. Y se pronunció el Supremo. Y fueron condenados en sentencia firme, teniendo que publicar dicha sentencia en su portal en un lugar preferente hasta en dos ocasiones porque en la primera hicieron trampa, como casi siempre.
Este tipo de periodista, lo mismo consagran a futbolistas que son auténticas medianías, que humillan y hunden en el fango a otros que como mínimo merecen el más profundo de los respetos en su profesión.
De esto puede hablar y escribir un libro el bueno de Aquivaldo Mosquera y su familia.
¿Qué motivos ocultos llevan a estos profesionales de la información a actuar de esta forma? ¿Es corrupción, venganza o ineptitud?
Pero estos periodistas, adictos a la polémica, sin escrúpulos y movidos por la codicia, acuden con
frecuencia al chantaje y a la diatriba. Unas veces con la pluma o el teclado y otras con el micro o el debate televisivo, van sembrando la sospecha, el desconcierto, incitan a la violencia al hipnotizado aficionado y hacen escarnio de sus víctimas mediante continuos linchamientos mediáticos.
¿Es otro tipo de corrupción? Según Nick Davies, sí. Yo, estoy seguro que también.
Injurias y calumnias contra quienes no acceden a sus intereses, y con excesivo servilismo se ponen al servicio de otros medios para, desde allí, seguir peleando por sus oscuros objetivos..
La corrupción se ha instalado en el país, y como no podía ser menos y para desgracia por la parte que nos toca de nuestro Sevilla FC, en CIERTO SECTOR de la prensa deportiva sevillana.
PD: El autor material de este artículo es mi amigo Marcu al cual yo solo me he limitado a completarlo minimamente y posteriormente editarlo, y como no podía ser de otra manera, a mi solo me quedaba solidarizarme en su integridad con la magnífica exposición del artículo en cuestión.
La mayoría de estos pseudoperiodistas están acomplejados y llevan una vida laboral bastante pésimo, de ahí el tiempo libre que tienen para vender basura.
ResponderEliminarAfortunadamente hay muchas personas que no comulgan con esta gente,a los hechos me remito,me adhiero a esta entrada como no podia ser de otra forma,un abrazo a ambos dos.
ResponderEliminarEstupendo post.
ResponderEliminarEstos tipos llevan ya años practicando esa corrupcion periodistica que deciis y aqui no pasa nada.
Que lastima que desde el sevillismo no se le haga frente como se deberia.
Un abrazo para los dos de tu amigo Gonzalo.
El tercer y ultimo hijo de la familia Marchena Jimenez expone que si en la familia del Rey existe corrupción donde no va a existir...
ResponderEliminar...en la mía nada mas!!
Un saludo al canoso y al medio canoso.
Dejemos de lado la corrupción, las tonterías y alentemos a los nuestros porque debemos ganar el siguiente partido.
No hagamos leña del arbol caído.
Pongámoslo en pie en intentemos volver a plantarlo. Hay veces que las raíces sacan fuerzas de donde no existen.
De lo que está claro es que un buen profesional, no necesita de argucias de ese tipo, su buen hacer profesional le da para vivir con la cabeza bien alta y rendir para la empresa que le paga.
ResponderEliminarEsto es una regla de tres bien sencilla.
Saludos.
Para mi como hace años, ignorancia pura.
ResponderEliminarPreparemos los escudos como perdamos el Sábado, lo mejor, no tomárselo a pecho y tomárnoslo como lo que es... 3 puntos.
Buen post, abrazos.
Estaría bien un libro de Mosquera. Básicamente porque así nos enteraríamos cómo la Directiva del Sevilla FC engañó totalmente al jugador contándole la milonga de que costó 2 millones de euros cuando costó ocho, señores, OCHO, un precio que el propio jugador sabía que no valía, ni valdría jamás. Estaría bien saber si esto mismo no fue causa de su bajo nivel al verse desbordado por la cuantiosa cifra abonada por el defensa.
ResponderEliminarY por hablar de periodistas corruptos ¿No debe la familia sevillista mirar primero en su casa? ¿No debe la familia sevillista, en primer lugar, denunciar a viva voz a cuatro personajes lamentables, insultadores, ocultadores de pruebas inculpatorias, empuñantes del sevillómetro a todas horas, que por no ser no son ni pseudo-periodistas, sino cualquier otro tipo de profesional no relacionado con el periodismo? ¿No resulta aún más sangrante saber esto cuando en nuestra propia casa hay periodistas muy queridos y de gran prestigio?
Vamos, digo yo. Tal vez mi visión no sea la adecuada.
Lo de los periodistas creo q ya lo han asumido hasta ellos
ResponderEliminarHoy Cepeda, el pensador (no confundir con el de Rodin) ha dicho en una radio publica que pagamos todos con nuestros impuestos, que Muchodeporte no es antisevillista es antidelnidista
(esto lo he sacado de un mensaje de twitter de una fuente fiable, no puedo confirmarlo 100x100)
No se esconden
Y encima llevan haciendo publicidad gratuita de su portal varios años en una radio publica y cobrando !
Listos tela
Sabeis JAngel y Marcu que cualquier extremo es malo y como dice el refrán "Que cada palo aguante su vela"
Un abrazo y enhorabuena como siempre
Esta noche hay debate en la tele del Sevilla y en Tele Sevilla de muchodeporte.
ResponderEliminarUnos a ver una cosa y otros otra y asi unos escucharan cosas buenas del sevilla y otrosveran como le atacan.
Cada uno a donde le corresponda. A desmarcarse, tirar y chutar.
Yo hace tiempo que asumí que allí donde hay dinero, hay corrupción. EN el fútbol hay dinero, y en la prensa que lo cubre también. Da igual la información, lo que importan son las audiencias. Y una audiencia idiotizada es mucho más rentable que una crítica. Y más fácil de sobrellevar.
ResponderEliminar¿No os dais cuenta del modo en que se está bipolarizando todo en nuestros días? O eres de una cosa, o eres de otra. Dos conceptos, dos palos a manejar, muchísimo más fácil para el que maneja que si hubiera variedad y diversidad.
Idiotizando, como bien decís.
Muy interesante post, como siempre.
Un abrazo