viernes, 2 de noviembre de 2012

Entre CalaCINHOS, CalaTÍAS, CalaPAHIC, CalaEINSTEIGER..., me quedo con Juan Cala.



Vaya por delante que desde siempre, desde que tengo uso de razón SEVILLISTA, siempre he mantenido la máxima de aquello que hiciera famoso Carlos Salvador Bilardo cuando dirigió en su primera etapa al Sevilla ( la segunda fue tan breve como infructuosa), de que "los coloraos son los nuestros".

Siempre.

Fuesen quienes fuesen esos de " coloraos".

En absoluto trato de hacer en este post,  disquisiciones, ni personalizar, ni desprestigiar, ni hacer de menos a ningún futbolista del Sevilla , leáse, Cicinho, Botía, Spahic, mucho menos cuando todos ellos, con matices, están ofreciendo un nivel más que aceptable en este inicio de temporada.

Solo pretendo, una vez más, tirar una lanza en favor de un futbolista criado en la carretera de Utrera, que aún habiendo demostrado ser un jugador competitivo como el que más cuando Antonio Álvarez tiró de él en el tramo final de la temporada 2009/10, que habiendo  sido repescado de su última cesión en el AEK de Atenas gracias al extraordinario nivel que el central sevillista estaba ofreciendo en una liga, sino de un gran nivel, si extremadamente complicada como la griega, lo cierto es que desde su llegada en el mercado de invierno de la pasada temporada tras el traspaso de Martín Cáceres a la Juventus de Turín, apenas si ha contado para el actual entrenador del 1º equipo sevillista, Michel.

No descubro nada si digo que Juan Cala es una de mis debilidades desde que Antonio Álvarez le diera una camiseta de titular hace tres temporadas y donde el lebrijano, a pesar de su juventud, le respondió siendo uno de los pocos jugadores que se echaron el equipo a las espaldas en aquel complicado final de temporada que acabaría con la clasificación champions  y con la consecución de la copa del Rey ganada al At de Madrid en el Camp Nou.

Un Antonio Álvarez que de la misma forma, sorprendentemente y a pesar de haber declarado en su día su disponibilidad para contar con Cala para la siguiente temporada, la 10/11 y después de que el club ampliara el contrato al ex del AEK, el ex técnico sevillista decidió en el último momento lo contrario alegando que lo mejor para el canterano sevillista era una cesión. Ignoro si esa decisión fue unilateral o contó con el consenso de la dirección deportiva, pero lo cierto es que yo nunca lo entendí y aún hoy sigo sin entenderlo.

Pero en cualquier caso, ahora Cala está aquí y es un futbolista del 1º equipo del Sevilla FC para todos los efectos. Bueno, esto es un decir. Me da a mi que para hacerse con una camiseta de titular igual lo va a tener un poquito más complicado.

Igual, y de ahí el titular de este post, en absoluto es ningún tono de menosprecio hacia ellos, si Cala se llamara Calacinho, o Calatía, o Calapahic, igual lo tendría un poquito menos.

Pero resulta que Juan Cala no viene de Brasil, ni de la cantera del Barsa, ni es internacional bosnio.
Juan Cala viene de la carretera de Utrera.

Y de la misma forma que defiendo a los técnicos cuando mantienen sus reservas con algunos canteranos que no han demostrado nada en la élite del fútbol más que un potencial aún por explotar, en el caso de Juan Cala, este ya ha demostrado con creces que su competitividad está como mínimo al nivel de poder jugar, o al menos de tener la oportunidad de desmostralo en este Sevilla.

Que tiene sus carencias, seguro, como todos. Pero en la balanza, yo creo y espero que mi fe en el jugador no me esté cegando más de lo deseable, como digo, en la balanza del debe y el haber, para quién os escribe no hay color.


Por tener, tiene hasta gol. Un extraordinario olfato, trabajado sin duda para rematar todo lo rematable a balón parado en el área rival. Cala busca el gol como un delantero sabiendo como le va a defender la defensa. Y esto no es casualidad.

Por tener, y ya se que hay quién piensa que esto es secundario, puede ser, para mi no lo es, a Cala le corre la sangre sevillista por las venas. Vino dispuesto a triunfar en su Sevilla y yo no tengo duda que así será. Pero bueno sería que al menos se le diese la oportunidad para ello.

Yo no se que tiene que hacer más Cala para hacerse con una camiseta de titular en este equipo. Igual salir con un traje de faralaes y marcarse un baile por bulerías cada vez que marque un gol con la camiseta del Sevilla. Que se yo.

En más de una ocasión, Michel ha comentado que hay situaciones en las que deje al jugador que deje fuera de las convocatorias, o incluso del once titular, no deja de ser injusto. Y aún con matices, repito, yo creo que tiene razón. Pero igual, también sería bueno que de vez en cuando, está, la injusticia no cayera siempre del lado de Juan Cala. Normalmente, y en el caso de Diego López y Palop tenemos un ejemplo reciente, el suplente se hace titular si este es capaz de aprovechar su oportunidad.

Es cierto que el nivel defensivo del equipo ha mejorado ostensiblemente esta temporada, pero también no es menos cierto que en los últimos encuentros, por h, por b, o por lo que quiera que fuere, ese nivel ha bajado de manera evidente. En la actualidad, el Sevilla tiene un gol average general de +1, teniendo en su haber doce goles a favor por once en contra. Once.

Cala apenas había jugado esta temporada unos minutos en Granada. Volvió en la ida frente al Español y, repito, espero no cegarme, amen del gol y de un par de remates más que tuvo a balón parado, Juan Cala mostró un nivel, jerarquía y una competitividad en defensa digna de elogio, mucho más cuando se trata de un jugador que no compite y que por tanto su ritmo de partidos hasta entonces era cero patatero.

Insisto, se que no es una tarea fácil para un entrenador decidir en determinadas circunstancias quién sale en el once y quién no. No es fácil y por otro lado, también una bendición tener donde elegir. Pero en este caso, creo que en justicia, Cala merece al menos  la OPORTUNIDAD de poder demostrar que puede ser un jugador importante en este equipo. De no ser así, igual sería lícito que lo pueda hacer en otro equipo y labrarse un futuro digno más allá de ser un jugador intranscendente en un equipo como el Sevilla, su Sevilla.

En cualquier caso, mi total apoyo a todo aquel que se ponga una camiseta del Sevilla y defienda su escudo con dignidad, solo eso.

Pero si un servidor tuviese que decidir, que afortunadamente no es así, entre CalaCINHOS, CalaTÍAS, CalaPAHIC, o por poner un ejemplo más estrambotico si cabe, CalaEINSTEIGER..., no tengo dudas, siempre me quedo con Juan Cala.



3 comentarios:

  1. El final de cala sera que Se tenga que ir y mientras aqui seguiremos aguantando. medianias. Gran y justo articulo.
    Un abrazo de tu amigo Gonzalo.

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  2. Voy a decir algo que llevo pensando desde hace tiempo.

    Comparemos entre dos situaciones, la opción A y la B.

    Opción A: La más demandada por los aficionados, que no es otra que darle su sitio a la cantera, contar con ella y darle las mismas oportunidades que se le están dando a los que llegan de fuera. Claro está con esta opción sobrarían todos los años varias operaciones de compra y venta.

    Opción B: Pasando de la cantera completamente, incluso existiendo una fuerte demanda social y por lo tanto llegada de un alto número de jugadores con sus correspondientes contratos y negociaciones con agentes y clubes de procedencia, ademas de otras operaciones de salidas obligadas por las propias llegadas.

    ¿Cual es la principal diferencia de estas opciones?, fácil verdad.


    Saludos.

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  3. Absolutamente de acuerdo con todas y cada una de las palabras aquí escritas. Aunque me falta una opción: "Calazio". Porque si Cala hubiera tenido no digo ya la mitad, sino tan siquiera un cuarto de las oportunidades que ha tenido el argentino...
    Y tal y como dice Anónimo, al final Cala se tendrá que marchar aburrido y nos acabaremos tirando de los pelos.

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