¿Para cuando la dimisión del presidente del Sevilla FC, José María Del Nido?

Si alguien ha entrado a leer este post buscando el morbo por saber algo de los asuntos judiciales del presidente del Sevilla FC, han dado en hueso.

Eso será cuando toque y esperemos que cuando eso ocurra, estemos hablando de que las cosas, tal cual está convencido el propio presidente hayan salido de la mejor manera posible. Sus últimas declaraciones al respecto al menos a quién os escribe le hacen pensar que afortunadamente asi será.

Los tiros van por otro lado.

Tengo claro que el contenido de este post va dirigido a un sector muy concreto de sevillistas, seguramente mucho menor del que se piensa, pero creo que sería interesante hacer llegar esta pequeña reflexión.

No es más que una regla de tres, simple para más señas...

Desde la marcha de Juande Ramos, el entrenador que más títulos ha conseguido en la historia del Sevilla FC, hay quién lamentablemente no ha sabido, no ha podido o simplemente no ha querido disfrutar de una de las etapas más fructíferas de la más que centenaria historia sevillista, por no decir la que más.

Y es respetable. Cada uno vive esto a su manera y nadie tiene autoridad moral para inmiscuirse en como vive y siente cada cual esta pasión.

Dicho esto.

Paulatinamente desde entonces, un halo de pesimismo, casi catastrofismo se ha ido apoderando de un sector de la afición al que nada parece haber contentado.

A pesar de ser el 5º-6º presupuesto de la liga española, clasificaciones europeas, dos de ellas con acceso a liga de campeones, un título, el conseguido en copa del rey en la 2009/10 en Barcelona, dos semifinales más de copa y siempre compitiendo por objetivos champions aún habiendo sufrido un proceso de transición generacional en la plantilla y en la que todavía está inmersa.

Con todo, el Sevilla de estos últimos cuatro años ha sido discutido no ya solo por parte de esa sectaria prensa local, sino por un sector de aficionados sevillistas, como tu y como yo que ha basado en la exigencia máxima su más exacerbada crítica.

Exigencia fundamentada y basada en gran parte por, según ellos, el abusivo precio de los abonos. Y entiendo que puedan tener sus razones.

Pero en cualquier caso, eso ya es inamovible en el pasado, tiempo en que intento proyectar el mensaje de este post.

Lo que ocurra en el futuro...

En su argumentación, cuatro entrenadores, Jiménez, Álvarez, Manzano y en la actualidad, Marcelino, los cuales ninguno han satisfecho los deseos de ese sector de la afición de la que hablo.

Para ellos, Marcelino, a pesar de llevar solo 12 jornadas, está ya sentenciado, Si o Si.

Cuatro entrenadores, todos con el beneplácito de la cabeza visible de la Entidad, el presidente José María Del Nido.

Desde entonces, la otrora casi idolatrada Dirección deportiva con Monchi a la cabeza y con Víctor Orta como mano derecha, viene siendo cuestionada de manera permanente ninguneando su labor profesional hasta llevarlo incluso a limites extradeportivos.

Dirección deportiva, refrendada, renovada y de la total confianza del presidente José María Del Nido.

Futbolistas fichados por la susodicha dirección deportiva, que pese a su inversión económica no han dado el nivel que se le presuponía y los cuales en todos y cada uno de ellos, como no podía ser de otra manera, la última palabra la ha tenido SIEMPRE el presidente del Sevilla José María Del Nido.

Un afamado y aclamado departamento de marketing del club, bajo la dirección de Manolo Vizcaíno, en el que sus logros tienen repercusión incluso a nivel internacional y que desde el 2007 viene siendo pasto de las más feroces críticas y donde cualquier movimiento es mirado con lupa.

Unos medios de comunicación propios, envidia del fútbol español, que bajo la batuta del subdirector general de marketing, el mencionado Manolo Vizcaíno fue pionera en muchos aspectos y que hoy son puestos en entredicho bajo pretexto de inmovilismo y falta de libertad.

El responsable de ambos departamentos, hombre de confianza del presidente José María Del Nido y refrendado en su cargo a pesar de las más furibundas críticas por parte de esa citada  prensa sevillana y sobre todo por ese mismo sector de aficionados que en los anteriores casos.

Como todo el mundo sabe, el Sevilla como entidad es una sociedad anónima deportiva, donde sus cargos están meridianamente definidos y que llegado el caso, el presidente sería el último responsable en la toma de decisiones.

Ante esta tesitura, a ese grupo sectario en sus críticas de la prensa mediática sevillana y a ese respetable grupo de aficionados yo les digo que:

.-Los cuatro últimos entrenadores, han sido todos contratados bajo la responsabilidad y el auspicio del presidente José María Del Nido.

.-La dirección deportiva no solo cuenta con la total confianza del presidente , sino que además, caso del secretario técnico Víctor Orta incluso ha sido renovado recientemente. Un Víctor Orta al que incluso hace un par de temporadas se le acusó de manera malintencionada del casi descenso del 1º filial a la 3ª división por no tomar la decisión de cesar mucho antes al que era técnico entonces, Diego Rodríguez, cuando de sobra era conocido por algunos que se le tiraron a la yugular los motivos directos del porque Diego Rodríguez no fue cesado con anterioridad.

Uno pregunta por aquí, por allí. Hace sus averiguaciones, contrasta las informaciones y al final llega a la conclusión que eso no fue así.

Y hasta ahí puedo leer.

.-Los "sonoros fracasos" de algunos fichajes fueron realizados bajo la total aprobación y responsabilidad del presidente.

.-El subdirector de marketing, Manolo Vizcaíno, sigue siendo mano derecha y hombre de total confianza del presidente.

Si tan desastroso y tan apocalíptico son todos estos aspectos de la Entidad, ninguno de ellos baladí y de vital importancia para el crecimiento de la misma, a mi me gustaría preguntarles a todos los que así piensan una cosita, por cierto, algunos de ellos de los que me congratulo de contar con una sincera amistad (una cosa no quita la otra).

Como dije antes, es una regla de tres simple.

Como responsable directo, subsidiario y decisorio, les pregunto: ¿para cuando la dimisión del mejor presidente de la historia del Sevilla FC?.

Yo creo que la pregunta es muy escueta y muy concisa.

Quién os escribe, no puede responderla porque yo ni estoy ni auspicio ninguno de los preceptos antes mencionados.

Creo honradamente que todos y cada uno de los argumentos antes esgrimidos y los cuales son  caballo de batalla para desprestigiar sistemáticamente pilares tan vitales de la Entidad, están sesgados, sacados del todo punto de contexto y tergiversados y manipulados en algunos casos hasta límites insospechados.

Esa es mi opinión al respecto.

Sin embargo, a ese sector de aficionados que cree firmemente en todo lo expuesto:

.-si el presidente es el último y máximo responsable de firmar a todos los entrenadores aunque para ellos hayan sido unos incompetentes.

.-si el presidente es el último y máximo responsable de fichar a todos los jugadores, incluso a esos sonoros fracasos que ha supuesto para la Entidad el dilapidar no se cuantos millones de euros.

.-si el presidente es el último y máximo responsable de mantener y redoblar la confianza en la dirección deportiva.

.-si el presidente es el último y máximo responsable de mantener la confianza en Manolo Vizcaíno y a toda su labor profesional.

¿Para cuando tienen previsto pedir la dimisión del mejor presidente de la historia del Sevilla FC?

Para que se me entienda, en mi pueblo, cuando uno acusa y acusa a los que están por debajo del que manda por incompetentes y el que manda no hace nada, o mejor dicho, hace todo lo contrario, los primeros dejan de serlos y el que pasa a ser el mayor de los incompetentes sería el que tiene la potestad para quitarlos del cargo y no lo hace.

Es la práctica habitual en una empresa. Cuando según ellos, el que está al mando, o sea el presidente del Sevilla FC se ha equivocado tanto en aspectos tan vitales de la Entidad y además, siempre según ellos pernoctando en el tiempo, lo normal sería pedir su dimisión.

No es nada nuevo. La pirámide empresarial que le llaman.

Tanto es así, que como cualquier empresa, todos los años se hace balance de resultados en la Junta General de Accionistas...

Cuando los de abajo se equivocan de manera tan ostentosa (no se cuantas veces van, pero vuelvo a repetir, siempre según ellos) y aún así cuentan con el beneplácito de la cabeza visible de esa pirámide empresarial, lo habitual, más pronto o más tarde, es cortar esa mencionada cabeza.

Me reitero en la pregunta, ¿para cuando la dimisión de Del Nido ?

¿Porque se atreven a atizar a los filtros protectores que están por delante del presidente, léase, técnicos, dirección deportiva, jugadores, consejeros y no se le pide, supuestamente, responsabilidades al mismo presidente?

¿Se atreverán públicamente a hacerlo?

Me consta, y es de justicia reconocerlo porque así me lo han hecho saber con sus comentarios en este vuestro blog, que hay quién haciendo uso de su libertad, me lo han manifestado de manera clara y sin cortinas de humos de por medio.

Pero igualmente digo que estos son los menos.

Con esto no pretendo alentar ninguna iniciativa, todo lo contrario. Pero si pienso que sería interesante poner sobre la mesa, sin cortapisas y a cara descubierta todos estos aspectos que para mi, repito, son vitales en el devenir de una empresa y que al parecer, escuchando, viendo y leyendo a algunos sevillistas, respetabilísimos, como tu y como yo , cualquiera diría que la Entidad está como mínimo, hecha unos zorros.

Que yo sepa, ni escucho, ni veo ni leo nada en ese sentido más allá de las puñaladas rastreras y por la espalda que esa prensa deportiva anaranjada de esta bendita ciudad práctica un día si y otro también así como de voces lanzadas con la boca pequeña de algunos que habiendo aporreado en los últimos tiempos y de que forma las puertas de la dirección deportiva, de Manolo Vizcaíno, técnicos, jugadores, etc, etc..., al llegar a la puerta del presidente, me da la impresión que le tiemblan las piernas...

Soy de la opinión que irremediablemente se han cometido errores, el fútbol no es ninguna ciencia exacta, que todo es manifiestamente mejorable, y que insisto como ya he comentado en más de una ocasión que habría que ser mucho más claro, conciso y directo en el mensaje de los objetivos reales del club, intentando buscar el equilibrio entre la exigencia y la pura y dura realidad.

Con todo, yo soy de los que a pesar de todo y a pesar de algunos, respetabilísimos (a ver si alguien tiene bemoles de decir que le estoy faltando el respeto a nadie...), como decía, yo soy de los que, al menos lo he intentado, he  disfrutado con mi equipo en las victorias y he sufrido en las derrotas.

Nada extraordinario. Debería ser lo habitual.

Con sus malas y sus buenas rachas.

Intentando relativizarlas todas, pero quedándome siempre con lo mucho y bueno que este equipo, con su presidente al mando, D. José María Del Nido Benavente nos ha dado en este siglo XXI.

Hay quién piensa que no...