Renovarse o morir. No queda otra.
Hay que modernizarse, no quedarse atrás, la imagen...
Hoy comienza un nuevo proyecto, el inicio de una nueva temporada, nuevas ilusiones, nuevos objetivos.
Anda los dirigentes del Sevilla FC en la tarea de renovar todo el ajuar de un club que en muchos aspectos andaba un pasito atrás con los nuevos tiempos.
En el devenir del siglo XXI, se han tomado en serio lo de gobernar la Entidad como una empresa, porque no se olvide nadie que el Sevilla FC, es una EMPRESA.
Infraestructuras, comunicación, profesionales, imagen, marketing...
Todavía queda, aunque hemos de aplaudir que se está en ello.
Pero...
A ver por donde salimos con el pero...
Hay un factor que no entiende de nada de todo esto que os he hablado, es inalterable a los tiempos, incombustible (debería serlo...), inquebrantable, incondicional, invisible, intratable, inmensa como su historia, su escudo y su bandera: LA PASIÓN por el Sevilla FC.
Y no se porqué, tengo la sensación que en estos tiempos de la comunicación, de las tecnologías, de la imagen, del marketing..., anda algo huérfana de brazos que la arropen.
Yo hablo de mi pasión por el Sevilla FC. No confundir con algo tan maquiavélico, tan manido y tan falso como el famoso "sevillómetro".
No hablo de ser más sevillista o menos. Nunca he creído en ello.
O se es, o no se es. Claro, que también hay quién suele utilizar este artilugio a su antojo, pero esa es otra movida...
Hablo simple y llanamente de mi pasión por este escudo, la que me inyectó mi padre, la que compartí con mis hermanos, con mis amigos de hace más de 40 años, con otros de fidelidad más reciente y la misma que trato de inculcar a mis hijos.
La misma pasión que por desgracia en los últimos tiempos me está trayendo más de un quebradero de cabeza...
La misma pasión que por desgracia en los últimos tiempos me está trayendo más de un quebradero de cabeza...
Ni mejor ni peor. Ni más ni menos.
Hablo de MI PASIÓN por este sentimiento llamado Sevilla FC.
La pasión a "jierro", sin condiciones.
Mi pasión no está en Facebook, ni en twitter, ni en ninguna de las modernas redes sociales.
No la busquen ahí.
No entiende de empresa, no me la intenten comprar, no está en venta, no hay clausula de rescición que pudiera venderse al mejor postor.
No entiende de marketing, no es negociable, no me la pongan en el escaparate.
No lo intenten.
Mi pasión es como el "evangelio según Labandón".
Llamenme antiguo, que estoy "obsoleto", pero tengo la impresión que cada vez vivimos más con la imagen, que está muy bien, pero que quizás estemos arrinconando sin darnos cuenta algo tan vital como la pasión.
Yo no entiendo esto de otra manera.
Yo no entiendo esto de otra manera.
Un Sevilla moderno, adecuado a los tiempos, por supuesto, faltaría más.
Yo no vengo de ninguna tribu perdida en los confines africanos.
Nací aquí, ¿recuerdas?, junto a ti. Entiendo y se perfectamente como respira el sevillismo. No intenten venderme ninguna moto.
Quiero pensar que ambos conceptos no son incompatibles.
Con la modernidad, con la imagen, con los nuevos tiempos, hagan lo que quieran.
Quiero pensar que ambos conceptos no son incompatibles.
Con la modernidad, con la imagen, con los nuevos tiempos, hagan lo que quieran.
Pero no se olviden, "la pasión, no entiende de marketing".
Como ha dicho el gran Frederíc Kanouté esta mañana al pasar el preceptivo reconocimiento médico de cada pretemporada:
"Tenemos que enseñar qué es esto a los nuevos para que el Sevilla siga siendo un club grande".
Ponganle nombre a "que es esto"...
Como ha dicho el gran Frederíc Kanouté esta mañana al pasar el preceptivo reconocimiento médico de cada pretemporada:
"Tenemos que enseñar qué es esto a los nuevos para que el Sevilla siga siendo un club grande".
Ponganle nombre a "que es esto"...
Una pasión que va creciendo desde que nazco hasta que soy hombre, y ahí ocurre que no soy capaz de ser imparcial y objetivo".
Como sevillista no tengo mucho arreglo, ni quiero tenerlo, es una pasión permanente y sufro muchísimo. Aún así, me siento muy feliz por ser un sevillista apasionado y no tengo ningún tipo de interés en dejar de serlo".
Grandísima entrada mis felicitaciones Juan Angel eres muy grande y como bien dices Renovarse o morir. No queda otra.
ResponderEliminarUn abrazo
Estoy muy de acuerdo contigo, yo creo que el titular resume muchas cosas que, en este caso, me permito el lujo de darle la vuelta al refrán, en este caso, un titular vale más que una imagen.
ResponderEliminarLa pasión y el marketing es como el aceite y el agua, no se pueden mezclar, los tiempos cambian, las cosas se modernizan, el marketing puede ser mejor o peor pero lo que nunca desaparece ni debería desaparecer jamás es la pasión a un escudo y a unos colores.
Un abrazo amigo.
Grande Juan Angel. Das en el clavo siempre, pones negro sobre blanco algo tan difícil de traducir como son los sentimientos. Aún así, continúas bordándolo. No pares, no, no pares.
ResponderEliminarHace poco te dije que contigo se había perdido un papafrita de los buenos. Ahora además te digo que hubieras sido un buen poeta.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.
Amén, Juan Angel, AMEN!!!
ResponderEliminarJorge Buzón.
Pasón, emoción, sentimiento, sensibilidad...
ResponderEliminar!!!Vuelven las musas!!!
!!!Que no se fueron nunca!!!
Un fuerte abrazo
Precioso.
ResponderEliminarHubo una época en la que los futbolistas no cobraban por jugar, lo hacían por amor a un escudo. Hoy día nadie discute que son profesionales que juegan por dinero, ya sea aquí o allá. Las cosas cambiaron en su día, pero la pasión continuó.
Ahora parece que estamos ante otro cambio, pero será superficial. EL fondo del asunto seguirá siendo el mismo. ¿La razón? Tú mismo la pones en el titular del post.
Un abrazo.
¡¡¡Hermosa pasión que tanto nos hipoteca la vida!!!.
ResponderEliminarSaludos.
Ahi estamos Jiuani,intentando sobrevivir.
ResponderEliminarMe has vuelto a emocionar tio.
Un abrazo de tu amigo Gonzalo.
Mi querido Juan Ángel, evidentemente esta pasión que tenemos y que como bien dices llevamos graba a "jierro" es tal como la describes. Es más, suscribo totalmente el post que publicas. Por ponerle un pero, que ya sabes que soy como soy, solo te diré, que "por mucha Sociedad Anómida, Sociedad Mercantil o como queramos llamarlo que sea un Club como el Sevilla, éste no tendría sentido sin esos sentimientos". Por tanto, una Empresa, de acuerdo, pero muy peculiar.
ResponderEliminarDe las cuestiones del Marketing, mejor no hablar, pues después de escuchar el himno del Betis en la Ciudad Deportiva y del "sabotaje" de las camisetas, creo que a alguno, le viene demasiado ancha esta camisa. Un abrazo.
No sé si será por la edad, pero me siento muy identificado con lo que escribes en esta entrada. Con los amigos, con mis hijos, los problemas de salud por esa pasión...
ResponderEliminarCon la otra renovación del club se consiguieron varios títulos, a ver si con la mano de pintura que le están dando a la institución nos trae lo mismo.
Enhorabuena por el post.
Saludos.
Enhorabuena por tu pasión sevillista hermano. Un abrazo.
ResponderEliminarLa pasión Sevillista cada uno la vive a su manera, y la tuya es grande, amigo!
ResponderEliminarUn abrazo.
Amigo, es que no me gusta el 13. Meses atrás estabas con "la mosca tras la oreja" por culpa del trece.
ResponderEliminarHay ahora 13 comentarios y no me gusta.
Así que la PASIÓN es fuego, es sentimiento hondo, es alegría a raudales o tristeza desbordada, es sensibilidad salida del alma...
Pero...
Por qué al yogourt se llama Danone,
a una estractora de humo en una cocina se le llama Mepansa o a una bebida de cola se le llama Coc-Cola
El marketing, amigo, el marketing.
Y así llegamos al 14 que antiguamente era el premio gordo en las quinielas.