Seguiremos esperando...

Se cumplió el único guión posible: ganar.
Cualquier otro desarrollo y desenlace del encuentro hubiese metido al equipo en problemas innecesarios toda vez después de la victoria del At de Madrid en la noche de ayer.

Sin exquisiteces, con un juego práctico y concediendo pocas concesiones al rival, el Sevilla esperó su oportunidad y la aprovechó.

Decía Manzano en la previa de este partido que el equipo debía cambiar la imagen de Getafe.
Lo más importante es que cambió el resultado.
¿La imagen?, bien, gracias...
Al menos no fue tan paupérrima como en el Alfonso Perez hace 15 días.

No está este Sevilla para mucho más.
Frente a un virtualmente descendido Almería, el Sevilla tuvo más la pelota, tuvo más llegada, pero muy poco fútbol y menos definición.
Fruto de ello, de no saber o no poder rematar la faena, en la última jugada del partido, en una falta al borde del área sacada de la manga por el del silbato, el sr. Rubinos (otro que tal baila...) el Sevilla pudo perder la exigua renta conseguida y perder lastimosamente 2 puntos vitales.

Afortunadamente, no fue así.
Y no lo fue, amen de porque Piatti mando el lanzamiento de la falta al limbo, gracias una vez más, a un excepcional Javi Varas.
Su paradón a bocajarro a cabezazo de Ulloa, escalofriante.
Habría que tirar de estadísticas y ver cuantos puntos ha dado en lo que lleva de temporada el portero de Pino Montano.

Poco fútbol, y el que hubo, a base de impulsos.

A la media hora del partido, el croata Rakitic tuvo que ser cambiado por una posible fractura de un dedo del pie por el brasileño Renato, a la postre, autor del único gol del partido.

Se está a la espera de las pertinentes pruebas médicas para confirmar este diagnostico.
Esperemos que no.

Sin duda, la nota más destacada del partido fue la expulsión del defensa almeriense, Jakobsen.
Su entrada a Cáceres ha sido de juzgado de guardia y gracias a Dios no hay que lamentar males mayores.

El lateral uruguayo al parecer tuvo que ser evacuado en ambulancia.
Se habla de alguna costilla rota.

Tras la expulsión del "karateca", el gol.

Una internada de Rodri por la izquierda que acababa de entrar por el lesionado Cáceres, la culmina Renato de un certero cabezazo dentro del área pequeña.
Muy activo el canterano, pero al igual que el pasado domingo frente al Villarreal muy fuera de su sitio.

A partir de ahi, los de Manzano se dedicaron a controlar la pelota a la espera de alguna oportunidad que cerrara el partido.
Y las hubo. Desafortunadamente ninguna acabó en gol.

Capel volvió a jugar a pierna cambiada.
En esta ocasión, el de Albox ha tenido algo más de presencia en el partido pero sigo pensando que se desaprovecha inútilmente esa banda derecha.

A expensa de que acabe la jornada, todo parece indicar que la lucha por las dos plazas directas que dan derecho a jugar la Europa League se reducen a At de Madrid, Ath de Bilbao y el propio Sevilla.

Y todo esto, sin Kanouté, sin Navas y habrá que esperar a los damnificados en el día de hoy, el croata Rakitic y Cáceres.

Tocaba ganar y esperar. Es lo que hay. Se ganó.
Este Sevilla está para poco más.
Pero cuanto no hubiese dado yo que nos hubiese dado lo mismo toda la temporada si al final se hubiese acabado ganando...

Seguiremos esperando.