A todo esto, esta noche, partido en Riazor.

No caben despistes.

Cabe recomponer la figura, levantar la cabeza y afrontar otra nueva batalla, otra guerra de guerrillas de las 18 que nos quedan en el campeonato domestico.

Tras el duro varapalo moral sufrido el pasado miércoles frente a la galaxia y toda su corte mediática, afronta el Sevilla un complicado partido de liga allá en tierras gallegas.

No será feudo fácil el Riazor de Lotina.

Este no engaña. Sus cartas las tiene echadas antes de cada encuentro a la espera que le salga una carta ganadora y llevarse los tres puntos.

Mal comenzó el equipo del de Meñaca esta temporada con cambio de sistema incluido y a la vista de los resultados no tuvo más remedio que volver a su archiconocida defensa de 5 que tan buen resultado le ha dado en toda su carrera deportiva como entrenador.

Para el partido de esta noche, Lotina ha convocado a 21 futbolistas donde destaca la baja por lesión de última hora del central Lopo:

Aranzubía, Manu, Ze Castro, Aythami, Colotto, Rochela, Manuel Pablo, Laure, Morel, Juan Rodríguez, Antonio Tomás, Rubén Pérez, Juca, Juan Domín

guez, Míchel, Valerón, Lassad, Riki, Adrián, Desmarets y Pablo Álvarez

Por otra parte, habrá que ver como llegan los de Manzano al choque tras la batalla de copa.

Con los recién llegados, Medel y Rakitic todavía fuera del grupo, el Sevilla viajó a La Coruña con 18 hombres:

Palop, Fazio, Martín Cáceres, Fernando Navarro, Zokora, Perotti, Luis Fabiano, Renato, Javi Varas, Escudé, Alfaro, Diego Capel, Negredo, Dabo, Acosta, Alexis, Sergio Sanchez y Rodri.

Finalmente Sergio Sánchez parece recuperado de la brutal entrada de Lass Diarra en la noche del miércoles en su tobillo derecho y ha entrado en la convocatoria.

En la misma, el canterano Rodri. Nueva oportunidad para el soriano de disponer de minutos con el 1º equipo.

Tres bajas significativas para este partido: Romaric, Kanouté y Jesús Navas.

El primero, damnificado del partido de copa con un esguince de tobillo, Kanouté por sanción y el palaciego aquejado de un proceso gripal.

Destaca nuevamente, aunque ya no es ninguna novedad, la baja de Luca Cigarini.

Todo hace indicar que en las próximas horas haya noticias en torno a la situación del mediocentro italiano.

Buen escenario el de Riazor para iniciar la escalada. No se puede permitir el lujo el Sevilla de regalar mas puntos. Las alforjas no están precisamente tan bollantes como para ejercer de Reyes Magos.

De nuevo, fundamental la seguridad defensiva. Hay que hacerse fuerte atrás, no encajar gol.

Concentración, intensidad y tensión en las marcas como compañeros de viaje en un partido que se presume feo por el rival que habrá enfrente.

Para llegar a la meta de Aranzubia, sin Romaric en la creación, todo indica que será Renato el acompañante de Zokora en el doble pivote. La otra alternativa, con Kanouté en Sevilla, colocar a Fazio con el costamarfileño y al brasileño como pareja en la mediapunta de Negredo.

Al hilo de esto, será interesante en los próximos partidos ver como inserta Manzano en el equipo a los dos nuevos fichajes.

Intuyo algo nuevo en el estilo de juego de este Sevilla y no solo por los nombres, sino más bien por las características de estos.

Pero eso será a partir de mañana.

Esta noche, tras el recital de despropósitos, de desvergüenza, de provocaciones llegadas desde la capital, el Sevilla deberá abstraerse de todo y poner toda la carne en el asador en pos de conseguir tres nuevos puntos que le acerquen un poquito más al casi quimérico objetivo.

Esperemos que esta noche el del silbato, el señor MigueI Ángel Ayza Gámez tenga mejor "suerte" que su colega Undiano.

Que no nos regale ningún gol, pero que tampoco no los quite.

Que a todo esto, esta noche, partido en Riazor.